Tigres y América se enfrentaron por una nueva final de la Liga MX, donde las Águilas se jugaba su copa número 14 en la historia del equipo, mientras que los de la UANL iban por la novena, y la sexta en la era de André-Pierre Gignac, el extranjero más ganador de los últimos tiempos.
Durante los primeros 99 minutos no se pudieron hacer daño, y se fueron hasta los tiempos extra, pero los felinos llegaron con un jugador menos, Raymundo de Jesús Fulgencio Román, quien fue expulsado en el minuto 80 por un manotazo en contra de Quiñones, delantero estrella del América y la Selección mexicana.
EL partido se complicó durante el tiempo regular y terminaron sin goles. Crédito: Mexsport
América se convierte en el campeón en tiempos extra y suma la 14 a su escudo
Fue Julián Andrés Quiñones responsable del primer gol que se dio en los tiempos extra del juego. Al primer minuto de haber arrancado las acciones. Tras una tanda de reclamos, fue amonestado el portero de la UANL, Nahuel Guzmán, quien a la siguiente jugada fue expulsado, dejando a su equipo con dos jugadores menos.
América logró su ansiada estrella 14 y se consagró campeón del Apertura 2023, al vencer 3-0 (4-1) global a Tigres en la vuelta, que se celebró ante una entrada de 74 mil 954 aficionados en el Estadio Azteca.
Julián Quiñones (91’), Richard Sánchez (104’) y Jonathan Rodríguez (119') definieron en el tiempo extra el encuentro y con ello, los azulcremas rompieron una racha de cinco años sin lograr la corona y ganaron por primera vez el título en un segundo partido en casa, desde que lo hicieron en el Apertura 2014, precisamente ante los felinos del norte.
A las Águilas les costó trabajo establecerse en el campo de juego, ya que a diferencia del partido de ida, esta vez su rival presentó un esquema más ordenado, sobre todo de medio campo hacia atrás.
Esto lo permitió a los felinos desplegarse con confianza con pases largos y efectivos, con el manejo del balón de dos exjugadores de Coapa: Diego Lainez como volante por derecha, y Sebastián Córdova jugando más por el centro, teniendo como único centro delantero a André-Pierre Gignac.
El francés fue una amenaza constante para Luis Malagón, y al minuto 8, tuvo un remate a bote pronto que apenas salió desviado de la portería. Aunque escaso de claridad, el cuadro azulcrema trató de responder con base en la habilidad de Julián Quiñones. Pero la conexión con el resto de los delanteros fue escasa, debido a los regios supieron cerrar bien los espacios.
Hubo un momento en que el juego cayó en un duelo cerrado por la posesión de la pelota. Y donde se presentaron varios roces, que el árbitro Adonai Escobedo dejó pasar para tratar de darle más fluidez al encuentro.
Fue, hasta el 27’, que América tuvo su primera gran oportunidad en una jugada que comenzó por el lado izquierdo y que remató Diego Valdés, pero donde el guardameta Nahuel Guzmán se lució al atajar el disparo. En jugada a balón parado, al 33’, Gignac dio el segundo aviso de la visita, con cabezazo, donde esta vez el héroe fue Malagón al desviar arriba del travesaño.
La falla más garrafal de los primeros 45 minutos se dio antes del descanso, cuando el mismo Quiñones no pudo rematar de cabeza de manera cómoda, pese a estar sólo frente a la portería tras un centro por el lado derecho. El complemento entró en roces y a los dos les costó trabajo hacerse de la posesión del esférico. Las más cercanas llegaron, al 63’, en un disparo de Valdés que desvió la zaga, pero sobre todo, al 70’, en un tiro al poste de Carioca.
Como parte de la tensión del encuentro, al minuto 72 se empezó a dar el grito homofóbico intentando presionar a Nahuel Guzmán. El encuentro cambió de rumbo con la expulsión a Raymundo Fulgencio, al 83’, quien sólo llevaba 10 minutos en la cancha, tras un roce y un supuesto manotazo a Julián Quiñones.
Tras un encuentro cerrado, fue el naturalizado mexicano el que se encargó de darle la gloria a las Águilas, al 91’, definiendo con una pelota que le cayó dentro del área. Y el partido se cargó del otro lado, al 96’, con la expulsión del Patón Guzmán.
Al 104 llegó Richard Sánchez con un tiro afuera del área, justo al ángulo del portero, quien fue recibido en la final del futbol mexicano con uno de los mejores goles de la jornada nocturna deportiva. Con esto, prácticamente se podía dar por finalizado el torneo, y se le entregaba a las Águilas el trofeo. Cabecita Rodríguez terminó el partido con un 3-0 directo al ángulo.
Con información de Oscar Zamora para EL HERALDO